Tú eres mi fentanilo
En el momento que existió un amor carnal
Me enganché a ti
Aunque enamorado, nunca fui feliz
No conocí la calma
Sí, la pasión y sus cadenas irrompibles
Fue una relación fugaz, solo unos meses
El olvido nunca llegó
El sufrimiento fue brutal, duradero, desgastante
Era yo un zombi
Mi vida no existía, solo había sufrimiento
Otra persona fue el antídoto momentáneo
La medicina paliativa
A falta de entrega total, el remedio se iba, carecía de efecto
Otra vez, tú, mi fentanilo, regresaste para aliviar por unos momentos
El alma herida
Y después, destruir lo poco que quedaba
Amor eterno, sí, correspondido, no
¿Hay alma más oscura que aquella que daña y destruye el amor que se le otorga?
Y vuelve a hacer lo mismo una y otra vez
Sí, las hay
Tú, mi fentanilo,
Me has dejado confundido
Sedado
Deprimido
Hipóxico
Muerto
Después de darme por instantes placidez extrema
Casi matarme o condenarme a un eterno penar
Dios y mi amor propio lograron que luchara
Peleara con todas mis fuerzas
Estuviera en una rehabilitación constante
Para liberarme y ser libre, feliz, pleno
Y listo para recibir el amor
Me niego a pensar que solo existe gente inmunda
De ser así
No existiría tanta magnificencia en el mundo