Te presentamos un resumen de las noticias más importantes de la semana

Noticias de la semana

Del 27 de octubre al 2 de noviembre de 2025

 

Asesinato de un joven aficionado del Club Deportivo Guadalajara

Un adolescente de 16 años fue asesinado y otros dos resultaron heridos durante una riña entre porras del clásico tapatío en Zapopan, Jalisco. La Fiscalía estatal ya emitió una orden de aprehensión contra un presunto responsable.

El fútbol, que debería unir, se ha vuelto un campo de batalla donde las frustraciones sociales encuentran su estadio. En México, la pasión se desborda no por amor al deporte, sino por la necesidad de pertenecer a algo, aunque sea a la violencia.

Bloqueos de pipas de agua en el Estado de México

Transportistas bloquearon carreteras como la México-Querétaro y la México-Pachuca tras un operativo estatal contra el contrabando de agua. Alegan pérdidas económicas y exigen regularización.

La protesta deja al descubierto un absurdo nacional: el agua, recurso vital, convertido en negocio paralelo. México se seca por corrupción, no sólo por sequías.

Movilización agraria y bloqueos por precio del maíz

Productores de veinte estados bloquearon carreteras para exigir precios justos por la tonelada de maíz. El Gobierno federal cedió: prometió subsidios, créditos y seguros agrícolas.

El campo vuelve a gritar su abandono. Cada protesta rural revela lo mismo: un país que sólo mira al campesino cuando le bloquea el paso.

Operación militar de EE.UU. en el Pacífico deja 14 muertos

El gobierno de Donald Trump autorizó una operación en el Pacífico oriental que destruyó cuatro embarcaciones presuntamente ligadas al narcotráfico, con saldo de 14 muertos.

Washington vuelve a ejercer su política del gatillo: “ordenar” el Pacífico a costa de vidas y soberanías. La guerra contra las drogas sigue siendo, sobre todo, un negocio.

EE.UU. cancela 13 rutas aéreas desde el AIFA

El Departamento de Transporte estadounidense revocó trece rutas aéreas entre México y Estados Unidos, citando incumplimientos del acuerdo bilateral de 2015. Aerolíneas mexicanas como Volaris, Viva Aerobus y Aeroméxico resultaron afectadas.

El golpe evidencia que el AIFA despega más en el discurso que en el aire. La política de cielos abiertos se vuelve una cortina que apenas cubre las turbulencias diplomáticas.

Asesinato del periodista Miguel Ángel Beltrán Martínez

El periodista Miguel Ángel Beltrán, de 60 años, fue hallado ejecutado en Durango con un mensaje atribuido al crimen organizado. Denunciaba alianzas entre cárteles en el norte del país.

México se consolida como el país donde informar cuesta la vida. Los sicarios matan, pero la impunidad les da micrófono.

Audi México suspende operaciones por bloqueos carreteros

La planta de Audi en San José Chiapa, Puebla, detuvo su producción por los bloqueos de carreteras y vías férreas provocados por las protestas agrarias.

La industria automotriz —emblema del progreso— depende del humor social de un país que no ha resuelto ni el precio del maíz ni el del agua. México, siempre en huelga consigo mismo.

Fiesta clandestina en el penal de San Miguel (Puebla)

Se viralizó un video de internos del penal de San Miguel conviviendo con mujeres, alcohol y música. Las autoridades abrieron una investigación.

El video muestra algo más que una “fiesta”: exhibe el teatro de impunidad donde los reos bailan y los custodios cobran entrada. El sistema penitenciario mexicano no reforma, recicla.

Escándalo en EE.UU. por órdenes ejecutivas firmadas sin Biden

Decenas de documentos oficiales y perdones presidenciales están bajo investigación, pues podrían no haber sido firmados directamente por el presidente Joe Biden.

La Casa Blanca vive su propio episodio de House of Cards. El poder delega hasta la firma, y la democracia se reduce a un trazo falsificado.

Uruapan volvió a sangrar

El alcalde Carlos Manzo fue asesinado esta noche mientras celebraba el Festival de Velas.

Murió rodeado de niños, de música, de luz.

Una metáfora brutal: el crimen apagando una fiesta.

En Michoacán la política no es un cargo, es una sentencia.

Ser honesto, un riesgo.

Y morir frente al pueblo, una advertencia que se repite como eco en las plazas de México.

Redacción Réplica

Revista Réplica

Y cuando esa montaña exista, quizá al fin podamos vernos desde arriba, limpios del polvo que hoy nos ciega...

And when that mountain exists, perhaps then we can finally see ourselves from above — cleansed of the dust that blinds us today.

En este país, la salud ya no depende de la Secretaría de Salud, sino de la caja registradora de las farmacias...

No, señores. El Periférico no es una autopista...

Hay una fauna salvaje que emerge todos los días en el Periférico Ecológico. No hablo de los perros que cruzan entre carriles ni de los zopilotes que sobrevuelan las zonas industriales; me refiero a los automovilistas con placas de otros estados que confunden esa vialidad con una pista de la Fórmula 1. La ley —esa vieja costumbre olvidada— dice que el límite es de 90 kilómetros por hora. Noventa. No 110, no 150, no “lo que dé el carro”. Pero parece que hay quien entiende lo “ecológico” como “exprés”.

Los que vamos por el carril de “alta” —con el control crucero activado y la conciencia tranquila para no pagar fotomultas— nos convertimos en los villanos del camino. Nos echan las luces, nos rebasan por la derecha, nos avientan el coche. Uno pensaría que van al hospital con una parturienta en el asiento trasero, pero no: van tarde al gimnasio, o simplemente van. En ese frenesí automovilístico, el Periférico se convierte en un teatro del absurdo con una escenografía de asfalto y humo.

En algunos tramos, y a ciertas horas, la velocidad se desploma al ritmo de tortuga asmática. Vas a vuelta de rueda, escuchando el pódcast de tu gurú de calma interior mientras, a tu lado, una señora guapa en camionetón va texteando como si no existiera el mañana. No mira el camino, pero tampoco se altera. Hay una serenidad casi budista en su desprecio por el peligro: ella y su camioneta de lujo se desplazan como si la ley de la gravedad fuera opcional.

Y luego vienen las escenas dantescas. Una camioneta negra persigue a un sedán con las luces altas; una moto con dos tripulantes se cuela entre ambos, rozando los espejos; un adulto mayor, al volante de un compacto, se aferra al volante como quien sostiene su última oración. En la mente del reportero de nota roja se proyecta la película que podría ser: una lluvia de vidrios, sangre y tripas rodando sobre el pavimento caliente. Pero no pasa. El milagro cotidiano del Periférico Ecológico: cientos de locos al volante que, por alguna razón inexplicable, todavía llegan vivos.

El clímax vino una tarde cualquiera. Al pasar por una cámara de multas, frené para evitar el flashazo —hay cámaras en las pendientes, y no hay auto tan preciso como para mantenerse en la velocidad máxima—. El acosador de atrás, en su Tiguan con placas de Morelos, pensó que lo estaba provocando. Me rebasó, se cruzó frente a mí y frenó en seco. Un duelo de estupidez y reflejos. Yo, estoico, reduje la velocidad con la misma calma con la que se apaga una vela. No me inmuté. No me bajé. Quizá mi serenidad lo desarmó.

Pero luego lo pensé: ¿y si no supiera manejar? ¿Y si el pánico me hubiera hecho golpearlo, levantarle el costado izquierdo y voltearlo sobre el pavimento? Al final, no pasó. Yo seguí mi camino, él siguió su vida, y el Periférico Ecológico siguió siendo lo que es: una jungla con señalamientos.

No, señores. El Periférico no es una autopista. Es una metáfora del país: todos creen tener prisa, nadie sabe a dónde va y, al final, todos terminan frenando ante la cámara.

Miguel C. Manjarrez

Revista Réplica

Más artículos...