Consejos...
Primero que nada comienza con estos útiles consejos:
1: toma de dos a dos y medio litros de agua al día para eliminar toxinas y regenerar células y 2: practica 15 o 20 minutos el ejercicio diario para mantener en forma los tejidos y quemar el exceso de grasa.
Incluye dentro de la alimentación una mayor cantidad de frutas y verduras. Así equiparás tu cuerpo con nutrientes, defensas y antioxidantes.
Reduce el consumo de grasas consumiendo alimentos cocidos al vapor, hervidos u horneados, además de usar aceites reducidos en grasas saturadas: en muchos aceites se especifica el porcentaje de grasa saturada contenido.
La fibra ayuda a una mejor digestión además de eliminar lo que el cuerpo ya no aprovecha. La puedes consumir en forma de cereales, semillas, verduras y frutas.
La carne magra es más sana, lo que significa menor proporción de grasa. Unos ejemplos son el bistec, bola y faldón. Evita consumir costilla y carnes que contienen zonas grasas.
Agrega un descanso mínimo de 8 horas y ayudarás a mejorar tu cuerpo y mente, ya que reduciendo el consumo de grasas aumentas la actividad cerebral sintiéndote descansado y fresco.
Un punto que me ha dejado meditando acerca de la nutrición a escala nacional, es que recientemente se han hecho estudios por medio de la encuesta nacional de nutrición en México, y se ha demostrado que una de cada dos mujeres en estado fértil tiene sobrepeso; existe una prevalencia a la obesidad de 41.4% en mujeres y un 28.5% en hombres.
Esta información puede cambiar si aprendemos a comer de forma balanceada, evitando así las dietas y los rebotes posteriores.
Quedo a tus órdenes